28 octubre, 2008

Mis disculpas

Últimamente me han dicho: "Maestro Zen, ¿para cuándo otra entrada?".

A lo que no puedo responder.

Tengo cuatro anécdotas para la posteridad pero no sé porque no me da el tiempo o, me faltar la inspiración.

No puedo decir mucho más que eso... Paciencia.

Pero les recomiendo que vean todas las entradas anteriores para los nuevos o los que desconocen. Y a los seguidores, a mis discípulos: Paciencia.

Me retiro por hoy... quería desahogar mi silencio con palabras.

21 agosto, 2008

No manejo el Tiempo

Esta entrada va a ser acotada... es simplemente una reflexión.


Cotidianamente me preparo un mate a la tarde. Lo que me esta sucediendo es lo siguiente. Pongo el agua y me voy a hacer algo para no perder tiempo en la espera, que es el mejor tiempo perdido. Al rato me acuerdo del agua, al llegar el agua del mate hierbe. Agarro el termo y lo lleno 3/4 y el resto lo lleno con agua de la canilla para nivelar la temperatura correcta.


Finalmente estoy preparado para disfrutar de un rico mate.


Pero resulta que cuando lo estoy por tomar, el agua ya esta fría y el mate parece que ha pasado la noche en vela.


Existe una linea de tiempo paralela entre la vida del mate y la mía. Y no hay Teoría de la Cuerdas que me lo pueda explicar.

24 julio, 2008

El baño celestial

Ayer me visitaron dos de mis sobrinos. (Ante todo quiero destacar, aun cuando más adelante se darán cuenta, que soy niñofóbico. Hay gente que no le gustan la arañas, o los espacios reducidos, a mi no me gustan los niños. ¿Será envidia de verlos en un estado de inocencia que tiempo atrás perdí? ¿O quizás porque no dejan de moverse y gritar con sus agudas cuerdas vocales? En fin, cualquiera sea la razón, prefiero no tener niños alrededor.) Como buen tío, me entregue a sus demandas, tomar leche con cereales, jugar a la pc, jugar a “las pirámides”, jugar un juego que invente un día para que se cansen y se duerman (ese es el nombre técnico – patente pendiente), jugar a las canicas, jugar a tirarnos todo tipo de contundente no duro, jugar a la guerra, jugar… jugar… jugar. Los niños tienen excesiva energía y al no tener responsabilidades, se dedican a dilapidarla en juegos. Son homoludens, hombres que juegan, todavía no son hombres pero saben por donde va la idea.


Ante tal día, decidí en cuanto llegó mi madre, delegarle los querubines y tirarme a dormir… no tenia sueño pero quería descansar mi cabeza, la posición horizontal fue mi elección, al tener llave de mi cuarto, estaba asegurado de que no tendría una invasión liliputiense por mi aposento.


Al rato me dieron ganas de ir al baño, salí de mi guarida y me dirigí al baño, lo admirable fue lo que sucedió. No hay chico que entienda la Razón, su libertinaje es permitido por su condición ante-púber. Uno de mis sobrinos acechaba desde un paraje cercano. Esperaba el ataque perfecto hacia mi persona, cuando llego mi madre, había quedado una guerra inconclusa, y él no la había relegado. Al escuchar que la bóveda donde me escondía se abría, él corrió al ataque. Para entonces yo había entrado al baño y fue hay donde me sorprendí de lo sagrado de tal lugar, un invisible candado insoldable. El baño es sacro, y hasta un pequeño lo sabe.



Escuche su llamado de guerrero, a lo que conteste: “Estoy en el baño.” Cualquier otra cosa, cualquier otra orden, indicación, advertencia, agravio no lo hubiese frenado pero esa frase lo freno por completo. Sabía, al igual que un romano, que el baño es muy importante.

Me maraville ante tal hallazgo, el templo de Zion. Enumeré las situaciones o acciones en las que el baño freno toda perturbación. Los teléfonos que no conteste, las compras que no baje a abrir, los invitados que no recibí, infinidad de cuestiones que fueron anuladas por el sacrosanto sitio en cuestión.

Luego salí del baño y me dirigí nuevamente a mi otro tabernáculo, mi habitación.


Mis sobrinos complotaban desde afuera, escuche sus vocecillas diabólicas, algo se tramaban. Silencio. Silencio. ¿Se abrían rendido? ¡Jamás! Comencé a escuchar la venida de unas ruedas diminutas para culminar con un choque sobre la puerta de mi santuario. Así se sucedieron varios autitos sobre mi puerta, estaba siendo atacado.


Si uno es argentino lo demás que viene a continuación será comprendido. Por mis adentros me dije, me están haciendo un piquete auto-bomba. El líder, mi sobrino mayor, aulló: “CHORROO, CRISTINO”… “CHOORROO, CRISTINO”. La TV y la realidad que los alimenta… en su inocencia mi sobrino pensó que “chorra, Cristina” era un insulto, lo único que hizo es cambia el género. (Es un hecho real)


¿Cual fue mi frustración? Fueron dos: por un lado cuidar a los chicos, por el otro advertir lo mal que esta el país. Pero valieron la pena, ahora se que puedo leer el diario tranquilo en el baño.

20 junio, 2008

Viajero sin destino

Un amigo me invito a que lo visite por su casa que queda en el barrio de Flores. Me indico que colectivo tomarme y partí para allá. El viaje fue largo, me hizo recordar algo que siempre olvido, que grande que es esta ciudad. En vez de irse de vacaciones a lugares lejanos, uno podría visitar todos los barrios de Malos Aires y sentirse que ha estado en más de una sola ciudad. Mientras pensaba lo ya dicho llegue a destino, me baje camine tres cuadras y toque timbre. Silencio. Timbre. Silencio.

Mi preocupación fue creciendo, habré venido hasta acá por nada. Dentro de mí se fraguaba una aventura, ir a recorrer este barrio que desconocía. Decidí llamar al hermano de mi amigo para que le avisara que estaba parado en la puerta de su casa. Motivos de tal triangulación: mi amigo me pasó el teléfono de su casa incorrecto, y su celular ya no lo utilizaba. Al minuto se abrió la puerta y nos saludamos.

Toque dos veces.

Tenés que pegarle a la ventana.

Ah… bueno.

Entramos, salude a los que estaban presentes y nos fuimos a preparar un mate. Tomamos un rico mate y a las 16:00 hs. fuimos a comprar facturas; la panadería abría a esa hora. Disfrute de un buen combo de facturas con manteca y dulce, además del mate ya mencionado.


(Voy a acelerar las cosas pues todavía ni he empezado a hablar de mi dificultad –frustración- a eso se dedica mi pagina así que no tengo que irme por las ramas, sino voy a terminar haciendo un diario de vida)


Hablamos, tomamos mate, comimos, hablamos, miramos las casas vecina, escuche la falta de ruido de un barrio tranquilo, fumamos unos cigarros y me retire. Nuevamente para mi barrio. Me acompaño hasta la parada del colectivo, el 92. (Mis desgracias siempre son omnipresentes (por que siempre hay un ómnibus presente, no porque sean todopoderosas).

Me subo al colectivo donde leo en el cartel TRIBUNALES y debajo RETIRO. Le digo al chofer, a TRIBUNALES por favor. "Si, no hay problema". El señor me lo dijo riendo pues tropecé al subir al colectivo.

Me senté, me puse los cascos (audífonos grandes) y mi viaje de vuelta comenzó. Siempre las vueltas son más rápidas… a excepción que uno no sepa como volver…

Iba en camino, llegue a una avenida que conozco, estaba a 8 cuadras aproximadamente de casa… pero confiaba en que me dejaría mas cerca luego, después de todo “Tribunales” queda a dos cuadras de mi hogar. Seguimos por otra famosa avenida que se llama Libertador, hasta que llegamos a RETIRO. Yo me cuestionaba el recorrido… por dentro me preguntaba: ¿Y Tribunales? Nunca pasamos por Tribunales.

Todos se bajan, El colectivero prende un cigarrillo, su novia le dice: “¿no habías dejado de fumar?” Yo preocupado.

Egmm… disculpa, ¿no vas a Tribunales?

Si claro, usualmente todos se bajan acá pero si querés te alcanzo, ahí termina mi recorrido.

Ehh… dale, gracias. Sigo preocupado.

Hace unas cuadras mas adentro de Retiro y frena.

Tribunales. Veo un enorme edificio antiguo, todo oscuro, de película de terror.

Ehh… ¿comó Tribunales? Esto no es Tribunales.

Me mira de reojo. Ehh… si. Esto es Tribunales de Retiro.

Uhh… la puta madre. Yo ya no más preocupado, sino frustrado.

El chofer deja de relojearme y me mira directamente, su sonrisa vuelve a aparecer.

No te puedo creer, pensaste que íbamos a Tribunales… esto es Tribunales de Retiro. Este ómnibus no va por Tribunales.

No basta con seguir las señales y carteles, sino no conocemos a donde vamos y mucho menos si nosotros no estamos manejando.


Mapa con los recorridos… hacer zoom.

11 junio, 2008

Despedida, encuentro y despedida

La primera despedida fue la de un amigo. Organizó para despedirse un “festejo” en un bar donde somos habitúes. Como era viernes, y usualmente este día de la semana, como así también los sábados; el lugar se atesta de gente. Llegué al lugar y me encontré con el anfitrión de la fiesta. Luego de intercambiar las típicas preguntas y respuestas (hola ¿como esta? Muy bien, ¿y vos? ¿Que haces? Ya te vas. Tomamos algo. Te invito. Esta puede ser la última vez que nos veamos. No soy alérgico a los crustáceos, etc.) me presentó a algunos de sus amigos que yo desconocía del su antiguo colegio, además de dos señoritas las cuales previamente ya había conocido. Me quede charlando por ende con las señoritas. La mayor parte de la conversación entre ellas fue: ¿Qué es mejor el verano o el invierno? Dos defensores indiscutidos del verano (entre ellos el que escribe y otra de las damiselas) y la retadora. Ganamos abiertamente la discusión, el verano es lo mejor que hay y el invierno apesta. Aunque no lo crean este intercambio fue sumamente divertido, teniendo en cuenta que estábamos en un bar con buena música (J. Kay y su banda – tiene otro nombre pero si saben de música van a saber de que banda hablo)

Esa noche además de la despedida, me habían invitado a una fiesta en otro lugar donde quizás iba a estar una mujer la cual me atrae mucho. La despedida había llegado a su fin. Salude afectuosamente a mi amigo y me retire. (“Sobra noche”). En el bar donde estaba las mujeres estaban muy pero muy lindas, pero no lo suficiente para impedir ir a probar suerte en la otra fiesta con la matrona en cuestión.

Me retiré de la fiesta y me fui a tomar el colectivo (no se porque la mayoría de mis relatos incluyen un ómnibus, quizás si me comprara un auto todo esto terminaría, quizás si tuviera el capital para hacer, y quizás sino fuera porque me gusta tanto beber y detestaría ser “el conductor asignado”, demasiados “quizás”). Tardó una perennidad, finalmente llegó. Me perdí por las calles posterior a mi descenso del vehículo de servicio publico. Justo esa calle se corta dos cuadras antes de donde me baje, por eso me costo un poco encontrarla. Pensé que Dios la había movido a propósito, suele hacerme eso, es tan bromista.

Arribé a la fiesta, y fui en busca de mi camarada que me invito a dicha fiesta. Lo avisté tomando una cerveza con un conocido. Nos saludos y prontamente fui en busca de mi amorío.

Allí estaba, hermosa, me miró, sonrió y se dirigió a mi encuentro, nos abrazamos. Luego nos quedamos bailando un poco, fue entonces que ella quiso tomar algo y se retiro a la barra. Me anime, este era mi momento. Voy a declararle mis intenciones. Voy a besarla… La seguí con cierta ansiedad y temor (un buen miedo), en eso… ahí estaba la perra frustración.

Otro hombre se encuentra con ella y la besa.

Todo había terminado.

Soy un dormilón. Pienso mucho antes de actuar. Ella que estaba soltera, ahora estaba de los brazos de otro hombre. En mi cabeza sonaba la canción, “El tiburón” – El tiburón se la llevo, se la llevo, el tiburón, el tiburón -.

Esa fue mi segunda despedida de la noche. Un despedida que nunca tuvo un verdadero encuentro.




10 junio, 2008

Perdida la botella, perdido el genio.

Ideas/Inventos de los cuales todavía no soy reconocido:

“Control Bottom”. Botón en el televisor que encuentra el control remoto. Este es tan pero tan obvio y perfecto que creo que mismo fabricantes de TVs lo saben pero no lo hacen en escala para satisfacción personal… se ríen de los que ignoran tal simple botón. Es un botón secreto que solo los que producen televisores tienen ese privilegio.

“Maní-Uno” es mejor que maní-cero (el slogan es supremo). Aceite de maní, el producto existe, no su comercialización nacional, irónicamente somos uno de los más grandes productores de maní. El aceite de maní es conocido por sus grandes cualidades no sólo en la gastronomía sino también en la ingeniería motora. El aceite de maní resiste mayores temperaturas que los demás aceite, y es un fruto es reconocido por su gran fuente de “todo” (minerales, vitaminas, toxinas, endorfinas, valerinas, insecticidas, etc.) Contiene altos valores de grasas "buenas" y antioxidantes, ya que posee vitamina E, en muchos casos supera a las frutas en sus beneficios para la salud: tiene tantos antioxidantes como las fresas o moras y aún más que las manzanas y las zanahorias.
El consumo regular de maní ayuda a prevenir enfermedades cardíacas, reduce el colesterol y hasta contribuye a bajar de peso, ya que proporcionan sensación de saciedad y altas dosis de energía, haciendo que la persona coma menos. Esta idea de producir y exportar aceite de maní es excelente y me encantaría demostrar que es un éxito en potencia si también se
comercializa en el mercado argentino. (Detalle el aceite de maní ya se produce y demás en argentina pero creo que el mercado argentino lo ignora para si mismo)

“Hada Verde”, en esta idea invertí tiempo, esfuerzo y capital, pero como advertirán no fue suficiente, sino no estaría aquí. La famosa y discutida bebida, la absenta. En este invento/idea hice bastante. La fabrique personalmente, hice todo lo necesario: compre las plantas, semillas, alcohol, utensilios, balanza, destiladores, etc. La hice. La test-iamos positivamente. Pero tuve dos problemas, uno no sé cual fue, el otro fue el capital. (Para más información entre a: hada-verde.blogspot.com)

“Wrapped-Up Skirts”. Esta es fantástica (valoración personal). Siempre le pregunto a las mujeres lo siguiente: ¿Por qué usan las mujeres polleras en invierno? Las respuestas son muy poco legibles y la verdad no lograba darles por validas sus respuestas. Pero luego, me di cuenta que no es un problema femenino el cual no llego a comprender. El asunto era la forma, la tecnología y el material de la pollera. ¿Qué tal si existieran polleras para invierno? Abrigadas, cómodas, que se puedan ajustar… otra persona se encargaría del diseño pero yo les daría el placer al hombre y a la mujer de usar polleras en invierno sin explicación, sin frió y con estilo.

“Un dispositivo pequeño que emita una señal de donde se encuentra cualquier otra cosa.”

(Tengo que trabajar en el nombre) Esas cosas que se pierden siempre, como las llaves, los anteojos… un pequeño censor, estilo GPS, al mejor espionaje pero para el hogar, así encontraríamos lo que siempre perdemos. Lo cómico seria que justamente lo enganchen a las llaves… ahí el problema no seria el invento, sino el mentecato que lo compro.

Software que escriba mientras hablas al micrófono del computador, tuve la idea mucho tiempo atrás cuando era un niño, antes que Ventana Vista, que por cierto no lo perfección.

Hay tres profesiones en las que soy un frustrado profesional: un inventor, un detective privado y por último un actor.

Los das ultimas profesiones como me gustan tanto no las voy a mencionar como fracasos pues todavía no los he tenido, sólo peco de no haberlas intentado.


NOTA IMPORTANTE: SI QUIERE SER CO-SOCIO EN ALGUNA/O DE ESTAS/OS IDEAS/INVENTOS COMUNIQUESE CONMIGO. ESTAS IDEAS ESTÁN EN PATENTE PENDIENTE, O SEA QUE SI ME MALVERSAN LA IDEA NO LES PODRÍA HACER JUICIO PERO SI PODRÍAN TENER UN ACCIDENTE, un ACCIDENTE TRÁGICO, un ACCIDENTE SOSPECHOSO, un ACCIDENTE LETAL. ¿Y saben quien seria el detective asignado? El novato que soñó ser un inventor y que nunca dará a conocer las verdaderas causas de la peripecia. ¿Y saben porque todos le creerán? Pues también siempre tuvo grandes dotes para la actuación.

26 mayo, 2008

Me invito a salir con ella

No es lo mismo que: me invitó a salir con ella, nótese el acento. Hace sólo cuatro días conocí una mujer divina. Era brasileña (me encantan las extranjeras), rubio, ojos celestes (usualmente mi preferencia son las morochas media multas), de cuerpo fenomenal. Toda una mujer. Al principio compartimos una mesa con sus tíos, pero dado que no me sentía a gusto, me retire a fumar un cigarrillo. Al poco tiempo ella se presentó.

-Oi (Hola, en portugués)

-Oi, ¿como va? (seguiría a continuación un portuñol mezclado con un spanglish, pero para placer de los lectores, lo voy a escribir en español).

- Me moría por fumar un cigarrillo.

- No hay problema, toma uno de los míos.

- Gracias, pero me gustan otros.

- Pídele a ellos que tienen.

- Uh, gracias.

Súmenle 120 minutos de conversación, pero de esas buenas conversaciones… no como las de pedir un cigarri…… ehh, no dije nada mejor. Resulta que ella es actriz, le gusta la bossa nova, quiere abrir un teatro de marionetas y por lo que pude ver, le gusto bastante. Fantástico, con el paso del tiempo, ella advirtió que estaban por irse sus tíos. Habló con ellos y negoció una cerveza más, para poder seguir parlando y mojando el pico. Antes de irse me dio el celular de su tía para que la llame el sábado para salir a deambular por Sueños Aires.

El Sábado la llame a las 21 hs. para ya ir organizando la salida. No atiende nadie. Llame nuevamente a las 21:30, 22 y hasta deje dos mensajes y un mensaje de texto. Era evidente; no podía comunicarme con ella y eso me alteraba.

Lo llame a un amigo en un último intento. El les había alquilado un departamento por unos días. Hable con él y para sorpresa me cuenta que se retiraron hoy de su departamento.

Nunca sabré si quizás a la tía le caí mal, o si no quería contestarme la brasileña, o si se marcho antes de lo estipulado. Nunca sabré si fue real lo que sentí cuando hablaba con ella. Quizás ella era la indicada para mí… o quizás, por el contrario, fue una de las tantas mujeres que me engañaron. ¡Changos!


ENCUESTAS ANTERIORES

¿Qué respondería?

¿Debo seguir con estas encuestas?

La respuesta de un mail

¿Que fuente puedo utilizar?

¿Sabe que es una promoción?

Se saca fotos carnet y le salen todas mal...

Llama para hacer una queja y lo ponen en espera

Ve SU mujer/hombre en la parada del colectivo